A la hora de climatizar una piscina, existen distintas formas de hacerlo que dependerán de determinadas características como el tamaño, si está cubierta o no, el clima, etc. Uno de los sistemas más comunes en las piscinas climatizadas son las bombas de calor, a través de las que podremos conseguir que el agua se mantenga a la temperatura deseada. Esta será una buena manera de aprovechar la piscina durante todo el año y disfrutarla también aunque haga frío.
En primer lugar, cabe destacar que se puede hablar de piscina climatizada cuando el agua está a una temperatura de 25-27ºC. De forma que a la hora de climatizarla, será necesario un sistema de calentamiento del agua, así como también velar por el mantenimiento de esta temperatura y calor.
De esta forma, uno de los sistemas más usados para calentar el agua de la piscina son las bombas de calor, ya que resulta uno de los más eficaces y económicos. Estos aparatos resultan tan eficientes porque además de calentar el agua, reparten el calor por toda la piscina.
Asimismo, este sistema de calefacción para tu piscina resulta totalmente respetuoso con el medio ambiente y además muy silencioso, por lo que no te generará molestias.
La instalación de una bomba de calor en tu piscina no requerirá demasiada complicación y el mantenimiento posterior también será sencillo.
En cuanto al coste, variará en función de la bomba que requiera tu piscina en base a factores como el tamaño de la misma, el clima de tu zona, etc. Lo más recomendable es que contactes con alguna empresa especialista en instalación de bombas de calor que podrá asesorarte sobre cuál escoger.
Otra de las ventajas de las bombas de calor para piscinas climatizadas es que son reversibles, por lo que puede amortizarse usándola también para el aire acondicionado.
ENERGIA SOLAR
Hasta no hace mucho, las piscinas se calentaban de forma convencional, normalmente con aceite combustible, gas o incluso electricidad. Sin embargo, la disponibilidad de los recursos energéticos naturales es cada vez más reducida, y es responsabilidad de todos evitar su despilfarro. No limitar su uso no sólo tiene repercusiones en el bolsillo del individuo y de la sociedad misma, sino que tiene consecuencias ecológicas no justificables a largo plazo. Dentro de poco tiempo, las reservas de energías fósiles empezarán a escasear de forma notable, y sus costes alcanzarán sumas impagables.
Por esta razón, cada vez más gente se inclina por el calentamiento de sus piscinas mediante la energía solar.
CALDERAS
Las Calderas para piscina, eléctricas o de gasoil, se instalan en el local técnico. Una caja de control permite programar la temperatura la más adaptada a la temporada lo que permite dominar mejor al consumo de energía. La subida en temperatura es rápida ( 24 a las 48 horas con la filtración en continuo) y de una fiabilidad a toda prueba. Para los modelos eléctricos, es importante tener un sistema de avasallamiento a las horas económicas de la empresa proveedora de electricidad. Los modelos de gasoil son más caros pero ofrecen un coste de utilización ampliamente inferior a las calderas eléctricas. Funcionan exactamente como calderas clásicas. Este tipo de calefacción de piscina es ideal para las utilizaciones puntuales (fines de semana, estancias cortas) pero también para las utilizaciones prolongadas. El coste de utilización queda bastante bajo en la versión de gasoil. El coste de instalación es importante, y la instalación es voluminosa.
El Intercambiador de calor:
Se coloca sobre la instalación de la caldera de la casa, el agua de su piscina, queda de esta manera, calentada simplemente por esta caldera. Es el agua caliente de su instalación existente que transmite el calor al agua de la piscina. Es una solución excelente si la piscina no se encuentra demasiado lejos de la casa. Por precaución, ambos circuitos son distintos y no se mezclan. La subida en temperatura de su piscina depende de la potencia de la caldera. Si esta última es bastante potente, la subida en temperatura de la piscina es generalmente muy rápida (2 días máximos, con la filtración en continuo).La instalación es bastante simple, y el coste razonable. Todas las calderas no son diseñadas para aguantar este tipo de sistema. Antes de optar por esta técnica es importante hacer un estudio previo.
